domingo, 9 de mayo de 2010

Toblerone

Uno de mis temas favoritos de matemáticas es la geometría espacial, y más concretamente los sistemas de planos y las posiciones relativas que pueden adoptar entre sí.

Antes que nada quiero aclarar que no me he equivocado de blog, sé que estoy en el Wonka. Pronto veréis la relación que tiene todo esto con el chocolate. :D

Dados tres planos, lo más normal es que se corten en un punto. Cada plano coincide con otro en una recta, y las tres rectas que se forman por la intersección de los planos dos a dos, se cortan en un punto.


Pero también pueden darse otros casos particulares si dados dos planos, el tercero de ellos tiene una dirección que de una manera o de otra es una combinación de las direcciones de los otros dos. Vamos, que para que tres planos no se corten en un punto, hay que hacerlo aposta.

Puede ocurrir que los tres planos pasen por una misma recta.


También puede ocurrir que los tres sean paralelos, que es lo más difícil.


O bien que dos de ellos sea paralelos y un tercero los corte en sendas rectas.


Y aquí viene el caso que más me gusta y al que quería llegar. Dos planos se cortan en una recta, y añadimos un tercer plano paralelo a la recta de intersección de los otros dos.
Como se ve, se forma una especie de prisma triangular prolongado indefinidamente por ambas direcciones. La figura del prisma triangular la tengo asociada a una chocolatina muy conocida por todos, que se llama Toblerone. Por eso, a este tipo de sistema de planos siempre lo he llamado ‘sistema toblerone’. :D
Esta chocolatina suiza se comercializa en España desde hace muchos años. Es del grupo Kraft, el mismo al que pertenece el chocolate Milka. Las hay de muy variados tamaños. Las he llegado a ver gigantescas.

Su característica forma externa de prisma triangular y su funda de cartón no han cambiado hasta hoy. Al quitarle el envoltorio, no es un prisma macizo, sino que tiene una estructura de dientes de sierra, lo que la convierte en un conjunto de pequeños bombones triangulares unidos a una base, y de ahí se van arrancando y comiendo. Al menos yo lo hago así. :P


Se trata de un delicioso chocolate con leche relleno con un fino agregado de miel y almendras. Es una chocolatina muy nutritiva. La hay también con chocolate blanco y con chocolate negro, pero yo prefiero el modelo tradicional.

Pues esto ha sido todo. Algo me dice que os ha gustado más y habéis entendido mejor la segunda parte de esta entrada. :D

10 comentarios:

Susana dijo...

Quien habrá hecho esta entrada??? Uy, no se, no se... qué complicado de adivinar...
jejeje...

Cloti Montes dijo...

Chema, mira qué tontuna, siempre asocio el toblerone a los aeropuertos. Así que aunque lo venden a una tercera parte de su precio en cualquier hipermercado ni se me ocurre comprarlo allí.
Mi marido le ha prometido a mi peke traérle uno que ha visto de cuatro kilos o algo así de bestial. Si lo hace, os mando foto.
Bssss
Cloti
PD Yo tampoco he dudado sobre la autoría de la entrada XDD

OLATZ dijo...

Me ha encantado tu entrada.A mi también me fascina ese prisma.

anele dijo...

Jaaaa, en cuanto he visto la imagen que ilustra el post no he tenido duda acerca de su autoría.

Por cierto, CLoti tiene razón. He leído por algún lado que ¡¡es la estrella de los Duty Free!! el producto que más se vende en los aeropuertos!!
Y no sé si también será cierto que se inspiraron en las montañas para darle esa forma.

Elphaba dijo...

Pues yo compre una vez en Inglaterra un toblerone de casi un metro de largo. No veais la coña de los de la aduana para pasarlo en el aeropuerto XDDD. Me encanta!

Ana I. dijo...

Uy, y ya hace años, mi marido (por entonces novio), me trajo uno enooooorme de Andorra (del que no quedó ni la raspa). Es que están buenísimos!

Riesgho dijo...

Pues yo a los Toblerone los asocio con las sesiones matinales del cine Pumarín. Ya no existe desde hace muchos años, pero una panera de naranja y un toblerone, comprados en el kiosko del cine eran para mí el mejor manjar, jajaja Que recuedos!!!!

Sin falta de leer el autor, también descubrí a Chema entre "líneas".

Geno dijo...

¡Ay, Chema, que rápido te hemos descubierto,. jajajajja! Está bueno el Toblerone sí, y yo también recuerdo el Cine Pumarín, Susana, mis primera sesiones cinéfilas fueron allí, jejejje ¡que pena que ya no exista!

Inma dijo...

Vaya complejo de rata tacaña me habéis metido!!! Lo encuentro tan carísimo en los aeropuertos que nunca lo compro allí. La última vez me traje genuino Toblerone de Suiza, exactamente igual que el vuestro de los aeropuertos pero comprado allí hace más ilusión.

Bertha dijo...

Y que buenos estan.