martes, 28 de diciembre de 2010

Chocotour en Zaragoza

Pues sí, Zaragoza piensa en los golosos y por ello ha creado una ruta por la ciudad que incluye la visita a algunos establecimientos que harán las delicias de los chocoadictos: Chocolatería valor, la heladería Häagen-Dazs, Chocolates de la abuela y las pastelerías Capricho y Fantoba (fundada en 1856).
De momento sólo se realiza los sábados por la mañana e incluso cuenta con servicio de compra de entradas on-line. La duración es de 2 horas e incluye degustaciones.



Así que ya sabéis: si os pasáis por la ciudad de la Pilarica no dudéis en endulzaros la mañana.

Fotografías: zaragoza.es

sábado, 18 de diciembre de 2010

Deberes chocolateros pendientes

Una de mis aportaciones al lote de chocolates que ofrecimos como premio por ganar nuestro concurso de recetas chocolateras fue esta tableta de la pastelería Mallorca. En esta cadena de pastelerías de la ciudad de Madrid tienen buenos chocolates, y me decidí por esta tableta, que tenía una vistosa funda de cartón con un dibujo de la Puerta de Alcalá. Pero, a decir verdad, nunca la había probado.


En el juego del Amigo Invisible celebrado este año en el foro de Esther y su Mundo, la amiga invisible que le tocó a nuestra querida Eva casualmente tuvo la idea de regalarle la misma tableta de chocolate. Al parecer, a Eva le gustó mucho y duró poco en sus manos. ;)

Eso ha sido lo que definitivamente ha disparado mi curiosidad por probar la tableta de chocolate con el dibujito de la Puerta de Alcalá. Así que esta mañana he ido a por una. Lo primero que he hecho ha sido leer los ingredientes para hacerme una idea de lo que iba a encontrar en su interior. Entre ellos figuran “leche” y “frutos secos”. Va a ser un chocolate completo y nutritivo, es lo que he pensado...


Observando la tableta por su parte inferior y su sección transversal, se comprueba que los frutos secos están finamente molidos. No se aprecian como tales, pero sí se observa una estructura granulosa que sugiere su presencia.

Al probar este chocolate, la textura al principio es pulvurulenta, pero pronto se vuelve cremosa al fundir el chocolate con leche que hace de componente matriz. Al saborear, se nota el aroma de los frutos secos molidos. Es un sabor que me recuerda ligeramente al del Toblerone, con la diferencia de que el chocolate aquí analizado no lleva miel.


Pues hala, el “chocolate de la Puerta de Alcalá” ya no tiene secretos. La verdad es que es muy adictivo... Luego a lo mejor lo pruebo otra vez a ver si detecto más características, que el trabajo de campo es muy importante... ;)