Las cañitas Sipahh vienen de Australia; están rellenas de unas pequeñas bolitas de colores que dan sabor a la leche a medida que se disuelven. Cada pajita aporta poco más de 13 Kcal y no contienen gluten ni conservantes.
La ventaja es que, junto con el cacao en polvo, parece otro buen invento para conseguir que los niños se aficionen a beber leche. Si bien existen 11 sabores distintos (chocolate, plátano, vainilla, fresa, menta con chocolate, cookies&cream, choco-plátano, caramelo, chocolate y miel, miel y toffe-manzana) en España sólo están disponibles las de fresa, chocolate, chocolate con plátano (foto inferior) y cookies&cream.
Ya sabéis, basta con meter la pajita en el vaso de leche, esperar un par de minutos y sip....ahhhh.
Hay que beberla despacio para dar lugar a que se vaya disolviendo poco a poco.
